¿Te suena el concepto de nuda propiedad, pero no sabes qué es, cómo funciona o qué diferencias existe con el usufructo? En este post de Gradual Homes te contamos todo lo que necesitas sabes sobre este término. ¡Sigue leyendo!

¿Qué significa nuda propiedad?

La nuda propiedad es el derecho de una persona sobre un bien del que es propietario, pero del que no puede hacer uso. La posesión y disfrute de dicho bien corresponde a otra persona por derecho de usufructo.

Una situación que, actualmente, es muy recurrente, sobre todo en personas mayores que son propietarias de viviendas y que no tienen herederos, por lo que deciden vender la nuda propiedad de su vivienda y reservarse el usufructo. De esta forma, se aseguran continuar residiendo en su vivienda de forma vitalicia a la vez que reciben una compensación económica a cambio de renunciar a la nuda propiedad en un futuro.

Por lo tanto, entendemos por la nuda propiedad la titularidad de un bien, pero sin su goce o posesión. Es un concepto de uso frecuente en el ámbito sucesorio también, sobre todo, cuando los herederos reciben en herencia la nuda propiedad de un inmueble, pero se reservan el usufructo vitalicio sobre el mismo a un tercero.

¿Qué diferencia hay entre nuda propiedad y usufructo?

El pleno dominio o propiedad es más que la titularidad de la propiedad total sobre un bien. Un concepto que, desglosado, da lugar a dos puntos: la nuda propiedad y el usufructo.

La nuda propiedad ya la hemos definido, mientras que el usufructo es el derecho de uso y disfrute que posee una persona sobre un bien del que no es propietario.

De esta forma vemos que, del pleno dominio, surgen tanto la nuda propiedad como el usufructo. Por lo tanto, la persona que reúna tanto el usufructo como la nuda propiedad será la plena propietaria de un bien concreto.

No hay que con confundir entonces nuda propiedad con usufructo ya que existe un contraste muy marcado entre ambos conceptos.

El beneficiario del usufructo podrá disfrutar del inmueble o bien tanto tiempo como dure su derecho. Pudiendo alquilar o vender el bien del que es usufructuario a una tercera persona, que puede ser el propio nudo propietario.

Mientras que el nudo propietario no puede alquilar el inmueble puesto que no lo posee. Sin embargo, sí que puede vender la nuda propiedad a un tercero.

Además, el nudo propietario solo adquirirá el uso y disfrute de la vivienda con la extinción del usufructo, que puede darse por:

• Muerte de la persona que tiene el usufructo
• Cumplimiento del plazo estipulado
• Incumplimiento de la condición resolutoria establecida en el pacto de usufructo

¿Qué se puede hacer con la nuda propiedad?

Cada vez es más frecuente que se compre la nuda propiedad de un bien, pero no su usufructo. Esta situación se produce, sobre todo, en personas mayores que no tienen herederos o que quieren recibir un ingreso extra sin renunciar a su vivienda.

El comprador se beneficiaría de un menor precio de compra en compensación por no poder poseer el inmueble durante un determinado periodo de tiempo. Aunque no lo parezca, la persona que tiene una nuda propiedad tiene también unos derechos y obligaciones que cumplir.

Entre esto derechos están:

• El derecho de propiedad porque que la ostenta, pero no tiene permitido su uso
• El derecho a vender la propiedad, siempre que se respeten los derechos del usufructuario
• El derecho a realizar obras y mejoras en la propiedad, siempre que no perjudique al usufructuario
• El derecho a que se le restituya el uso y disfrute una vez terminado el usufructo

Entre sus obligaciones también están las de hacerse cargo de las reparaciones extraordinarias del bien, respetar el derecho del usufructo, pagar impuesto y tributos, abonar la hipoteca, responder ante el usufructuario y hacerse cargo de los gastos de la comunidad.

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